Muchas cosas están pasando en el mundo a pesar de que el Coronavirus ocupe todas las portadas. La supremacía mundial está en juego, al igual que la economía y muchos otros factores. El Coronavirus ya es historia de una pandemia, ya que la humanidad se enfrenta a un enemigo común. Pero no todo es como parece…
La similitud con la mayor catástrofe nuclear
Tal y como ocurrió en Chernobyl, una catástrofe ocurrió dentro de las fronteras de un régimen comunista. Durante los primeros años todo fue silenciado. Esto dio lugar a un desastre que amenazaba con cambiar la vida del planeta, tal y como lo conocemos. Sin embargo China, al igual que Rusia, reaccionaron para minimizar daños, una vez que las pérdidas ya eran incalculables. Ante los ojos atónitos del mundo, se llevó a cabo la mayor cuarentena de la historia. Más de 1.000 millones de chinos fueron confinados en sus casas, paralizando el motor económico de un país, que estaba a punto de convertirse en primera potencia mundial.
El Apocalipsis de Wuhan
La ciudad de Wuhan, de 11 millones de habitantes, llegó a tener más de 100.000 infectados. Se trataba de una enfermedad un tanto extraña: en la mayoría de casos no afectada para nada, en otros se comportaba como un resfriado común, luego como una gripe y finalmente como una neumonía. De hecho se conoció como la neumonía de Wuhan. El porcentaje de mortalidad era del 2%. Lo curioso es que afectaba en mayor medida según la edad y las patologías de los pacientes. Lo preocupante aquí era el nivel de propagación por persona. Los hospitales sobrepasaban su capacidad. La gente moría por la calle. Parecía que había llegado el fin del mundo.
China gana la guerra… pero no frena al virus
El comunismo que se vive en el país, es prácticamente una dictadura. Los ciudadanos, cuando salen a la calle, están vigilados por drones que se aseguran que cumplen las normas. Es por ello que cuando el gobierno mandó la cuarentena total, muy pocos fueron los que osaron desobedecer. Pero las normas eran muy duras, incluso llegaron a tapiar las casas de infectados, para que no salieran. De esta forma el virus se detuvo y un mes después la situación parecía controlada. Sin embargo había un problema: los infectados que no presentaban síntomas también contagiaban la enfermedad. Esto hizo que el Coronavirus se propagara a Corea, Italia, España y todo el mundo. En la historia de una pandemia: Coronavirus, Europa se convirtió en el nuevo epicentro.
Corea también consigue controlar al virus
Mientras que el Coronavirus se extendía por todo el mundo, Corea libraba su particular batalla. Ellos consiguieron detener al virus en tiempo récord. Y eso que se propagó por una secta que contaba con más de 100.000 fieles. Se hicieron miles de tests rápidos al estilo McAuto y una App con la que se seguía el rastro de las personas infectadas. Por supuesto se tomaron muchas más medidas, pero esa fue la clave para no tener que detener su economía. Nosotros somos la especie más inteligente: ¿por qué no usar la tecnología para derrotarlo? Fueron más rápidos que la propagación, incluso llegaron a las personas antes de infectarse.
La propagación en Italia
El Coronavirus llegó a Italia mediante un habitante chino que no presentaba síntomas. Fue descartado de Coronavirus por parte de los médicos, y fue contagiando a miles de personas sin ningún control. En el partido Atalanta-Valencia se contagiaron cientos de valencianos, extendiendo la infección también a España. Poco después la Organización Mundial de la Salud proclamó la pandemia. Por si fuera poco Italia registró la mayor tasa de mortalidad: se disparó hasta el 8% por la población envejecida. Italia sintió la guerra en sus carnes, con médicos que debían elegir quién moría y quien vivía. Una auténtica masacre de que forma parte de la historia de una pandemia: Coronavirus.
España en la guerra del Coronavirus
Días después de que el gobierno enviara a la población a una manifestación feminista, se dispararon los contagios en España. Entonces se declaro el estado de alarma y se movilizó al ejército para dar apoyo a todas las personas que luchan. Las personas quedaron confinadas en sus casas, a excepción de algunas personas que debían salir a trabajar. Todo ello después de que la economía mundial ya se resintiera alarmantemente en la bolsa. Además, para salvar esta situación, se aplicó un paquete de medidas sin precedentes, con el 20% del producto interior bruto destinado a dar apoyo a las personas, para que puedan subsistir durante la cuarentena y conservar sus trabajos. Se unió la sanidad publica, la privada y el ejército para salvar vidas, porque la avalancha de contagios se espera brutal. Y a todo esto hay que sumarle la crisis de la corona.
Teorías de la conspiración
El origen de la pandemia se cree que fue un virus, que estaba en un murciélago, que mutó al entrar en contacto con un pangolín. Y después volvió a mutar al ser comido crudo en el mercado de Wuhan. Sin embargo hay otros que piensan que se trata de un ataque biológico de Estados Unidos, o que escapó de un laboratorio de la propia ciudad de Wuhan. Sea como sea, lo que está claro es que China estaba a punto de convertirse en la primera supervivencia mundial, y poco después de la guerra comercial del año anterior. También se habla de que es un plan de reducción de la población mundial, por la mortalidad que da este virus según las diferentes edades.
Esta teoría cobra fuerza cuando en plena pandemia Estados Unidos manda a 30.000 militares a Europa, para una misión secreta. Se especula incluso que estos soldados habrían sido inmunizados con una vacuna. Rusia está muy atenta a estos movimientos, y prepara su ejército detrás de sus fronteras. ¿Estamos ante las puertas de la tercera guerra mundial? Públicamente ya hay una guerra fría entre Estados Unidos y China, que buscan una vacuna contrarreloj. Pero… ¿quién gana con todo esto? Ganan los señores más ricos del mundo, aquellos que son dueños de los bancos que inyectan dinero a los países en esta grave crisis mundial. Estamos ante historia de una pandemia: Coronavirus. Un cambio crucial en la geopolítica mundial, tal y como ocurrió durante la segunda guerra mundial.
También se habla de que este virus ha sido creado de forma natural por el planeta, debido al exceso de contaminación, el cambio climático y toda la destrucción que causa el ser humano. Desde que medio mundo está confinado en sus casas, los ríos vuelven a estar limpios, el aire se despeja, los bosques dejan de ser talados… Es como si el mismo planeta está limpiándose del daño del ser humano. Y esto es algo mágico, ya que nos da una segunda oportunidad, para seguir viviendo en La Tierra.
Pero lo que está claro es que estamos en un enclave histórico, donde a los de arriba conviene tenernos más controlados, implantar el dinero digital y una serie de medidas que no habríamos aceptado de otra manera. Todo ello conectando con una crisis mundial que prometía ser más dura que la que se vivió en 2008. El Coronavirus es el punto de inflexión que conecta todo y acentúa ese cambio que ya se esperaba.