Toro de 2016 es una película española. La dirige Kike Maíllo y en el reparto: Mario Casas, Luis Tosar, José Sacristán… Dos hermanos se reencuentran después de que uno estuviera 5 años en la cárcel. Ambos iniciarán un viaje salvaje para salvar la vida.
Créditos de Toro de 2016
- Título original: Toro
- Año: 2016
- Género: Thriller, acción, crimen
- Duración: 100 minutos
- País: España
- Director: Kike Maíllo
- Guión: Rafael Cobos, Fernando Navarro
- Reparto: Mario Casas, Luis Tosar, José Sacristán, Ingrid García Jonsson, Claudia Canal, José Manuel Poga, Luichi Macías, Alberto López, Nya de la Rubia, Manuel Salas, Ignacio Herráez, Christian Mulas
- Puntuación: 5,3 puntos
Argumento de Toro de 2016
Toro (Mario Casas) es un chico que decide dejar una banda criminal, pero en el último momento lo detienen y debe pasar 5 años en la cárcel. Cuando regresa se reencuentra con su hermano López (Luis Tosar), que tiene mucha culpa de lo que le ha sucedido. No quiere saber nada de él. Pero se verá envuelto en un ajuste de cuentas y tendrán que hacer un viaje salvaje por una Andalucía mítica para salvar la vida.
Mi opinión sobre Toro de 2016
Tengo que decir que está película me ha gustado, pese a las enormes críticas que estoy leyendo al documentarme para redactar este artículo. Y me ha gustado porque los 3 personajes que tienen peso en la trama son famosos: Mario Casas, Luis Tosar y José Sacristán. También me ha gustado porque durante la aventura cargada de acción, se van descubriendo secretos del pasado que dan fuerza a una trama cargada de tensión y bien dosificada. Y por último destacar que la historia se sigue y se comprende, a pesar de encontrarnos con algunas situaciones inverosímiles. Por todo ello Toro de 2016 es una película interesante. Tal vez no termine de ser creíble, pero su trepidante acción te mantendrá en tensión todo el tiempo.
La crítica de Toro de 2016
Toro de 2016 es un thriller de acción bien conseguido. Abarca tantas cosas que acaba fallando en más de una. Habla del dinero fácil, las relaciones padre-hijo, el amor, la traición, el destino… Y esa introspectiva gusta, pero no los personajes poco creíbles, las casualidades encadenadas, la estética por encima de la acción… Centrándonos en la estética tenemos un estilo barroco en las letras de crédito o simbología religiosa que nada aporta a la película Toro de 2016. También podemos hablar del personaje de Mario Casas, cuya interpretación es excelente, pero representa al típico samurai invencible… españolizado. Lo cual no es creíble. Pero lo peor de todo es el sonido, porque los efectos sonoros tienen más volumen que los susurros de las voces.
