La llamada de 2017 es una película española. Se trata de una comedia musical que mezcla religión y adolescencia. Dos amigas se encuentran en el campamento de verano cristiano. Pero en mente tienen fiestas, música, alcohol…
Créditos
- Título original: La llamada
- Año: 2017
- País: España
- Duración: 108 minutos
- Género: Comedia, musical, adolescencia y religión
- Director: Javier Ambrossi, Javier Calvo
- Reparto: Macarena García, Anna Castillo, Belén Cuesta, Gracia Olayo, Richard Collins-Moore, María Isabel Díaz, Secun De La Rosa, Esti Quesada
- Puntuación: 7 puntos
Argumento de La llamada de 2017
Dos adolescentes se encuentran en el campamento de verano cristiano, al que van todos los años. Sin embargo en su cabeza no está la religión, ni Dios, sino el reggeaton y el electro latino. Tienen un grupo llamado Suma Latina, con el que intentan triunfar. Para ello deberán colarse en las fiestas más exclusivas, que están cerca del campamento donde pasan el verano.
Mi opinión sobre La llamada de 2017
Estaba viendo esta película y he pasado del aburrimiento al entusiasmo. Dos estados de ánimo muy diferentes, debido al modo en el que comienza la película y el modo en el que se desarrolla. Empieza con un cantante haciendo una versión “bonita” de Whitney Houston. Pero después suenan canciones de Henry Mendez. Una de las mejores canciones para escuchar de fiesta. Y luego las canciones de Suma Latina son preciosas. Pero también hay que destacar la trama, que se vuelve cada vez más interesante, incluso aunque parece una completa locura. Pero… ¡así son los adolescentes!
La crítica de La llamada de 2017
Se trata de una película que gustaría especialmente a los que busquen un musical y una trama de adolescentes. No es una obra perfecta, pero sí es fresca, ya que presenta un trabajo muy diferente al que estamos acostumbrados a ver. La dirección, por ejemplo, es poco ingeniosa. Refleja a la perfección ese deseo de los jóvenes, de buscar su lugar en el mundo. Muchos de ellos se encuentran perdidos, buscando ser algo importante, y se deven conformar con ser uno más. Las interpretaciones son buenas, aunque hay que reconocer que mejoran con la juventud, curiosamente. Pero lo mejor de todo es que acaba siendo un canto a la libertad. Trasmite alegría, y eso vale mucho.