La habitación del niño es una película española de terror, de películas para no dormir. En ella podemos ver a una familia con un niño recién nacido que se muda a una vieja mansión. Por el vigilabebés ven a un hombre sentado junto a la cuna.
Créditos
- Título original: La habitación del niño – Películas para no dormir
- Año: 2006
- Género: Terror, intriga, paranormal
- Duración: 76 minutos
- País: España
- Director: Álex de la Iglesia
- Reparto: Javier Gutiérrez, Leonor Watling, Sancho Gracia, María Asquerino, Antonio Dechent, Manuel Tallafé, Terele Pávez, Asunción Balaguer, Eulalia Ramon, Gracia Olayo, Antonio de la Torre
- Puntuación: 6,4
Argumento de La habitación del niño
Un matrimonio con un recién nacido se muda a una vieja casa, pero muy grande. Cuando se acuestan, ponen un escuchabebés descubren que hay alguien más en la casa. Una figura sombría se sienta al lado del bebé todas las noches.
Mi opinión sobre La habitación del niño
Una película que me ha gustado mucho. Aunque tengo que decir algo: no entiendo el comportamiento de los padres del bebé. Una pareja normal habría cogido al niño y lo habrían acostado con ellos. Pero claro, de esta forma no tendría trama. Lo que sí me ha gustado bastante ha sido cómo cambia lo que se cree que está pasando. Pasa de ser un ladrón, a un espectro, a la locura del protagonista a… realidades alternativas. Sólo sabremos al final la cruel realidad. Y ese impactante final también me ha gustado. Le doy una gran nota a La habitación del niño. Y la recomiendo a todo amante del terror.
La crítica de La habitación del niño
Homenaje a las historias para no dormir de Ibáñez Serrador. Se habla de paradojas temporales, la locura y espíritus. No se sabe a ciencia cierta lo que está pasando, pero ahí está el acierto de esta gran idea. El final es estremecedor. Todo se consigue con bajo presupuesto. Se consigue una intriga impresionante. A veces no es necesario grandes efectos especiales, sino que una buena idea es suficiente. Mención especial para la interpretación de Javier Gutiérrez (el chiquitín de Los Serrano). Él es el centro de la obra, su temor, nerviosismo y locura. Aunque La habitación del niño va claramente de más a menos, pero es que empieza rayando la perfección y termina de notable.