Juego de Tronos es una serie de TV basada en las novelas de George R. R. Martin, posiblemente uno de los creadores que ha dado más que hablar durante los últimos años. Acaba de empezar la cuarta temporada después del asombroso final de la tercera. Artículo con peligro de spoilers, avisados quedáis.
Después de la boda roja
Después de los últimos capítulos de la tercera temporada donde el bueno de R. R. Martin no deja casi títere con cabeza cargándose a unos cuantos personajes de la trama principal, entre los que estaba el bueno de Robb Stark, su madre Catelynn y su esposa. Esto para los que no habían leído los libros fue un escándalo, durante días ardió twitter clamando la injusticia de la muerte de su/sus personajes favoritos. Lo que os queda…
Esta cuarta temporada de Juego de Tronos empieza con fuerza, continuando la trama de manera ligera y contándonos rápidamente la situación de esta historia coral.
Los Lannister
Al principio del capítulo vemos como funde la espada de Ned Stark, para hacer dos nuevas espadas. Símbolo de poder del patriarca de los Lannister, que le da una a su hijo Jamie, y otra a su nieto Joffrey. También el bueno del padre quiere convencer a Jamie que abandone sus votos de protección al Rey y vaya a cuidar Roca Casterly.
Mientras tanto, Tyrion, el favorito de casi todos, recibe a un nuevo personaje: Oberyn Martell. El cual le deja entrever que viene aquí con la única intención de vengar a su hermana violada y asesinada por “la montaña”, Clegor Sandance. Todo esto mientras nuestro entrañable y bajito Lord intenta que no le pillen poniéndole los cuernos a su mujer con su amante… cosa que no parece que le vaya muy bien.
¿Y mientras, qué hace la manipuladora de Cersei? Beber vino y echarle en cara a Jamie que lo secuestrasen. Esta chica si que se merece un buen final, porque tanta tontería no es normal.
Daenerys
La parte de Daenerys sigue sin explotar, sin enganchar, y creo que por esto se lleva menos metraje que otros personajes desde hace ya tiempo. En esta ocasión la vemos jugar con sus dragones, pasar lista a sus tropas y ver como su último flechazo ha cambiado de cara. Esto no es debido a ninguna trama sino a un cambio del actor principal. Ed Skrein se marcha para hacer de un Jason Statham “nuevo y más joven” en la saga de Transporter, mientras Juego de Tronos se queda con Michiel Huisman.
¿Qué deparará esta temporada a la khalesi? Esperamos que ya alcance la ciudad esclavista y los ponga a todos firmes.
Los Stark
Jon Stark está de enhorabuena, una parte del consejo de la Guardia de la noche no le cree culpable por haberse camuflado entre los salvajes. Aunque lo que está claro es que su personaje ha evolucionado viendo los dos puntos de un conflicto. Por otro lado, sus antiguos amigos reciben la visita de otro pueblo de salvajes a los cuales le gustan los paltos elaborados con carne humana. Además, cosa rara en un clima invernal y donde todo el mundo va muy tapado, es que ellos están ahí con la cabeza rapada pasando un frío que pela, con un par.
Por último Arya, aparece en una posada junto a su captor, que se va tornando en protector cada día que pasa. Y el perro, al ver que se comenten injusticias en nombre del Rey se marca una escena que quedará para la posteridad.
Mi opinión
A grandes rasgos, esta temporada pinta bien. Las tramas están desarrolladas y en su punto álgido. El problema de las series con estructura coral es que muchas veces pueden ser liosas con gran número de personajes y subtramas. En cambio, Juego de Tronos sabe dosificar esas tramas y hacer que en ningún momento sean cansinas o eches en falta algún personaje.
Habrá que ver cómo se desarrolla pero puede ser una de sus mejores temporadas y así la audiencia lo confirmó esta semana generando un promedio de 6,6 millones de telespectadores.