Al promocionar un producto u otras impresiones, hay muchas posibilidades de utilizar serigrafía o tampografía. Sin embargo, para elegir entre uno u otro, hay que conocer los procesos que tomará en cada caso. Conozcamos la diferencia entre serigrafía y tampografía. Para más información visitar esta web.
El proceso de la serigrafía
Este proceso utiliza una plantilla de malla. Con ella la tinta se pasa al material. Para ello se necesita una capa de nylon, acero poliéster. Este material bloque las aperturas que contenga la pantalla, a excepción de la plantilla. En la pantalla se tiene que situar el materia que se desea imprimir, junto a la tinta. Entonces se presiona mediante una escobilla de goma o rodillo.
Esta técnica es histórica. Se hacía en China entre el año 960 y 1279. Además artistas contemporáneos como Andy Warhol. Ellos utilizan la impresión de la pantalla para conseguir las famosas impresiones coloridas que buscan. Hay dibujos de este estilo con Elvis Presley o Marilyn Monroe. Además hablamos de un a técnica que cuenta con un fácil acceso y un bajo coste.
Pero hay que destacar que el proceso de la serigrafía es más preciso y sofisticado de los años 60. Ahora hay prensas automáticas de impresión. Actualmente se utiliza para hacer productos promocionales, recipientes y, lo más habitual, camisetas personalizadas.
Las imágenes que se consiguen con la serigrafía suelen ser limpias, de alta calidad y afiladas. A esto se le suma el proceso barato, rápido y con una excelente opacidad de la tienta. Esto último hace referencia a la capacidad que la tinta tiene para ocultar el material que queda justo debajo de ella.
Pero la serigrafía también tiene sus desventajas. Para empezar no es aconsejable utilizarla cuando se trabaja con detalles muy finos. A esto hay que sumarle que los colores de tinta, cuando son aplicados en una imagen multicolor, tienen que ser aplicados de forma separada. Y por último destacar que que existe una posibilidad que se la impresión se pueda mover hasta 1/8 pulgadas. Esto se conoce como un desaliniamiento, que debe solucionarse con la sobreimpresión.
Por tanto estamos hablando que la serigrafía es un método eficaz y rápido, siempre que no se busque un resultado con mucho detalle o multicolor.
El proceso de la Tampografía
Otro método de impresión es la tampografía. En esta ocasión se trata de transferir la tinta a un sello, o almohadilla de silicona. Se trata de un proceso muy parecido al de los sellos de goma, aunque mucho más avanzado. Mediante una máquina que contiene la almohadilla, se coloca la tinta con el dibujo que se desea, para después presionarlo sobre la superficie del material elegido. De esta forma se dibujaría el diseño escogido.
Este proceso es más moderno que la serigrafía. Se inició en los años 60. La principal ventaja es imprimir formas deformadas. Cobró mucha relevancia en la industria de los relojes suizos. Pero desde entonces mucho se ha mejorada. Ahora con maquinaria robótica, se imprimen objetos en serie. Desde platos, a jarrones o incluso productos de electrónica. Hasta se ha elaborado tinta comestible para dulces.
El proceso da mucha resolución. Y esto se mantiene al trabajar en bordes definidos, medios tonos y otros detalles. Se utilizan tecnologías avanzadas, como sistemas de lásers. La variedad de mecanismos es grande, y con ella la cantidad de objetos que pueden ser impresos.
Pero claro, la tampografía también tiene sus inconvenientes. Por ejemplo no se le puede dar excesiva velocidad a las impresiones. También hay que destacar la posible opacidad en ciertas áreas. Así como las ligeras variaciones de tono. Los colores múltiples aun deben ser aplicados por separado. Y pueden haber errores de registro.
También se puede imprimir mediante una almohadilla, pero es un método más caro y lento. Evidentemente es más confiable. Aunque es la técnica de impresión más elegido, especialmente para promociones y detalles delicados.
Conclusiones
Ambas son técnicas revolucionarias. Cambiaron la forma de crear productos promocionales. Y como habéis leído, cada una de ellas tiene sus virtudes y sus inconvenientes. Pero como la tecnología sigue avanzando, pronto esas deficiencias serán eliminadas y se presentarán más aplicaciones que harán de la impresión todavía más eficaz.