Ya el Apple Watch Series 3, el nuevo reloj inteligente de Apple. Se trata de un salto muy importante, aunque hay que reconocer que tiene todo lo que tenía que tener el primer Apple Watch. Ha mejorado mucho y lo analizamos aquí.
Más potencia y productividad
Ahora las aplicaciones se abren instantáneamente. Siempre tarda menos de 1 segundo, aunque la App esté cerrada. También podemos destacar que Siri puede hablar con el usuario. Parece algo normal, pero en las anteriores entregas no lo hacía. El procesador es más potente, un 70%. Aunque no hay ninguna referencia en la página web de Apple, ya que es muy posible que les diera vergüenza reconocer lo que había antes.
La batería de Apple Watch Series 3
La batería dura 2 días, aunque recomendamos cargarla 1 vez al día. Si tratas de exprimir el dispositivo 48 horas, es posible que llegue al final de la segunda jornada con muy poca batería o apagado. También hay que destacar que hay un sistema de ahorro de energía, que puede darle un poco más de autonomía. Incluso si utilizas el reloj inteligente para hacer deporte, la batería no será mermada considerablemente aun usando toda la potencia del dispositivo.
La conectividad de Apple Watch Series 3
Otra de las novedades de este Apple Watch Series 3 es la conectividad. Destacamos el LTE, o lo que viene a ser un estándar para teléfonos móviles. Lo que haría que el reloj podría llamar sin depender del propio teléfono. Sin embargo este es uno de los principales defectos, ya que no ha podido ser implementando en todos los países y falla en aquellos que sí. Parece un fallo de conectividad. Puede tratarse de un fallo en el software que podrían arreglar para la siguiente revisión del sistema operativo. Y en España no llegará hasta 2018 por lo menos.
Conclusiones
Pensamos que Apple Watch Series 3 es un buen reloj inteligente, pero a penas responde a las exigencias de la gran compañía para la primera entrega. Todavía tiene mucho que mejorar, como la independencia total con el iPhone, la batería y nuevas funciones. Por ejemplo se cree que en el futuro podría tender una carga automática, aprovechando los movimientos de la muñeca. Entonces sí tendríamos un dispositivo futurista, como sugiere el nombre de reloj inteligente. De momento tendremos que conformarnos con lo que hay.