En el mundo no todo es metrópolis, la naturaleza también forma parte de nuestro entorno y el entorno fuera del celular. Y el mundo es tan antiguo como la conciencia que no lo recuerda, aún así nos deja maravillas para apreciar. Al viajante de las pirámides de Egipto, la torre de piza, la islas de pascua, etc. Quizás todas estas cosas se le hagan sorprendentes. Sin embargo retroceder en el tiempo es gracias a esas maravillas que apreciamos en el presente. Es el caso de la cueva de Altamira.
Datos sobre la cueva de Altamira
La cueva de Altamira está declarada como patrimonio mundial por la UNESCO y te contaremos porqué.
La cueva de Altamira está ubicada en España, específicamente en Santillana del mar, Cantabria a 2 kilómetros de la metrópolis. Se descubrió en 1868 por Cubillas Modesto al liberar su perro atrapado en unas gruetas. Su estudio lo tomó Marcelino Sanz de Sautuola, fue excava y estudiada por los prehistoriadores y pertenenciente al periodo paleolítico.
Lo curioso de la cueva de Altamira
Más allá del hecho de ser una cueva había algo dentro de esta que la hacía particular. La cueva poseía dibujos, pinturas, arte. Estás pinturas fueron el primer conjunto pictórico que para el momento se conocía en extensión. La mayoría de los estudiosos de arte y prehistoria no atribuían como verdaderos o verídicas las pinturas dentro de la cueva. Muchos exponían que el arte era moderno y no era parte del repertorio de culturas en la edad de piedra.
Bisontes, caballos, manos, ciervos fueron las pinturas más comunes halladas dentro de la cueva, así como símbolos extraños. Estás pinturas fueron estudiadas y gracias a los avances científicos y al carbono 14 dataron la antigüedad de las imágenes. Las imágenes darán de hace 14.000 a 15.000 años y se situa en el periodo Magdaleniense.
Características propias
La cueva de Altamira cuenta con características propias entre esas se destacan su corta longitud: 270m. Tiene escasas ramificaciones, el recorrido es un poco difícil por su estreches. Si temperatura oscila entre los 13,5 y 14,5 °C
La protección de la cueva aumentó con el pasar del tiempo
Después de su reconocimiento los niveles de protección han sido tanto nacionales como internacionales. La visita se llegó a restringir por ser un destino turístico muy demandado. En 1917 se abrió al público y siete años después se suma un guía turístico. En 1982 se establece una medida de 8500 visitantes al año. En el 2001 se aperturó un museo réplica cerca de la original aunque aún se sigue frecuentando la original.